lunes, 20 de julio de 2015

Cogiendo colorcito...

Con la llegada del verano y las vacaciones, somos muchos a los que nos gusta ponernos morenos y ganar el colorcito que el resto del año no tenemos.
Hoy, quiero daros unos consejos para conseguir un moreno saludable. Seguramente, alguna vez hemos escuchado la frase "somos lo que comemos".

De nada sirve estar todo el día tirados al sol, sólo durante la primera media hora de exposición al sol nos ponemos morenos. Después, lo único que hacemos, sino se toman precauciones, es jugar con la salud.
Nos arriesgamos a quemarnos si no usamos protector solar, puede darnos una insolación, nos deshidratamos...

Una forma natural de ponernos moremos es comiendo alimentos ricos en carotenoides (beta-carotenos, alfa-carotenos y licopeno) que activa la melanina de la piel (lo que hace que ganemos calor) y la protege de los radicales libres porque se sitúan en las capas externas de la piel. Los carotenos son precursores de la vitamina A, por lo que ayudan al cuidado de nuestra piel, mucosas y visión. ¿Qué alimentos son ricos en carotenoides?
Los que más carotenoides tienen son aquellos de color anaranjado, rojo y verde. Siguiendo esta clasificación, del grupo de color verde podemos encontrarnos con: grelos, repollo crespo, berro, espinacas, acelga y lechuga. En el grupo de color rojo nos encontramos con el pimiento rojo, la sandia, el tomate, cerezas, arándanos, fresas... tienen efecto antioxidante, favorecen la circulación y tonifican el corazón. Frutas y verduras de color rojo contienen vitamina C que ayuda a estimular la renovación celular.
En el grupo anaranjado, está la zanahoria, que es el alimento con mayor proporción de carotenos (más que el grupo verde y rojo). otros alimentos son la calabaza, papaya, mandarinas, naranjas... Otros alimentos aunque de un color amarillo y que contiene carotenoides es el plátano, el maíz y limón entre otros.

Estos sólo son algunos de los alimentos que nos ayuda a cuidar de la piel. Es muy importante también la ingesta de alimentos con vitamina E, C y D, que algunos de los mencionados ya contienen. Para saber qué alimentos son ricos en carotenoides hay que fijarse en cuáles son los de mayor pigmentación, de color más brillante, más vivo.
Como podéis comprobar, la frase "somos lo que comemos" es cierta. Podemos lograr un bronceado saludable cuidándonos un poco.


Por otra parte, tampoco se puede abusar de estos alimentos, los excesos no son buenos, y una consecuencia de éste, es la carotenemia. Se trata de una alteración de la piel producida por el exceso de betacarotenos en el organismo. Se percibe muy bien, porque la piel se vuelve de un color anaranjado, y mirando las palmas de las manos podemos saberlo. Uno mismo no es capaz de percibirlo pero la gente seguro que se da cuenta.

No debemos dejar de usar protectores solares, con diferente grado de protección según nuestro tipo de piel. Para pieles claras aconsejo factor 30, sobre todo con las primeras exposiciones al sol, y repetir la aplicación cada 2 horas o después del baño. Pieles más morenas pueden bajar la protección, aunque no recomiendo a nadie utilizar menos de 10. En niños, y más en bebés, hay que usar siempre factor 50, o al menos yo lo recomiendo. Después, las pieles que se quemen con facilidad, albinos, o pieles muy claras también deberían usar 50 (al menos los primeros días de exposición).


Finalmente, después de la exposición solar, debemos seguir hidratando la piel. La Nivea de lata azul, es untuosa pero es excelente para hidratar nuestra piel como si fuese un "aftersun".  Además nuestra piel llegará a un punto que no se ponga más morena, no coja más color y tendremos que hidratarla mucho. Esto último lo digo por experiencia propia, y fue un médico quien me dijo que era muy bueno usar la Nivea (lata azul) para hidratar la piel y nunca dejar de usar protector solar.


Espero que el post de hoy os sirva de ayuda y lo tengáis en cuenta, la salud es lo primero. Cualquier duda o pregunta podéis dejar vuestro comentario o enviar un email (en contacto a la derecha de la pantalla).