La infusión de manzanilla es muy
buena para problemas digestivos, para regular el colesterol, como
sedante, para la retención de líquidos, como colirio,
para el dolor e incluso como antiinflamatorio.
Son muchos los beneficios que nos
aporta la manzanilla (Matricaria chamomilla) y también a nivel
estético, en nuestra piel. A continuación os explicaré cómo y
para qué usar la infusión de manzanilla en la piel y conseguir que
tenga un aspecto radiante.
Lo primero que hay que tener en cuenta
es preparar la infusión. Para ello hervimos agua, la echamos en un
vaso y dejamos reposar una bolsita de manzanilla (se puede preparar
más cantidad, según lo vea cada persona). La infusión hay que
dejarla enfriar y la podremos utilizar durante tres días.
Principalmente nos vamos a beneficiar de uno de los componentes de la
manzanilla: el azuleno. Muchos cosméticos utilizan este componente
para pieles sensibles porque es calmante e hidrata.
La manzanilla la usaremos en el rostro
y nos ayudará en los siguientes casos:
- Piel irritada: la piel se puede irritar al desmaquillarse (por ejemplo) y la infusión la podemos emplear para calmar esa irritación y como si fuese un tónico.
- Bolsas y ojeras: ayuda a disminuirlas porque activa la circulación, tanto linfática como sanguínea. Se aplicará suavemente y favoreciendo la circulación (de fuera hacia dentro).
- Capilares: a mucha gente se le notan los capilares en la cara y al dilatarse con el calor, se pronuncian más. La manzanilla es vaso-constrictora, dicho de otra manera, estrecha los vasos sanguíneos. Si empapamos unas compresas (gasas) con la infusión y la dejamos actuar, se notarán menos.
- Granos, dermatitis, quemaduras y orzuelos: entre las propriedades de la manzanilla se encuentra la antiinflamatoria, ideal para tratar los granos, orzuelos, quemaduras y dermatitis. Además reduce la aparición de acné, granos, dermatitis...
Estos son algunos de los principales
usos que podemos darle sobre la piel en el rostro.
Podemos sacarle mucho partido a la manzanilla y, en lo que a mi
respecta, lo natural siempre será mejor. Se puede emplear en algunos
casos más específicos y acompañada de otros componentes, que
próximamente iré publicando.
Por último, si usamos la manzanilla
por la mañana es ideal para tratar las ojeras y bolsas, o antes del
maquillaje, aunque recomiendo que se utilice por la noche ya que así
la piel descansa mejor, se beneficia mejor de las propiedades prolongando su efecto y no
exponemos la piel.
(Cualquier duda o pregunta podréis dirigirla al correo electrónico si así lo deseáis).